La vida por los colores: El EAS fue a Santa Fe

Esta vez nos tocó alentar al Equipo en el interior. Entonces nos levantamos antes de que asomara el sol, agarramos la bandera y salimos para la ruta en dirección a Rafaela (Santa Fe) con el baúl del coche lleno de fútbol.

Sabíamos que nos tocaba un partido chivo, de esos que nos gusta jugar. El comedor De Corazón tiene un equipo de pibes y pibas con mucha voluntad y dedicación, que no pierden el deseo de ganar ni en la peor de las adversidades.

Por eso fuimos bien preparados y mentalizados. ¿Nuestra estrategia? Agarrarlos de sorpresa. Y nos salió más que bien.

Del auto, junto con nosotros, bajaron cajas y bolsas repletas: camisetas, pantalones, medias, botines, pelotas y otras herramientas deportivas para que Luciano, el responsable del club, pueda darles a sus 40 chicos/as todo lo indispensable para que sigan creciendo.

Ahora, De Corazón no sólo tiene indumentaria deportiva, sino también los elementos básicos para que los pibes y las pibas puedan entrenar y salir a la cancha. ¿Alguna duda de que ganamos por goleada?